Tim Burton (Beetlejuice, El hombre manos de tijera, Big Fish, etc.) nos trae la historia biográfica de Margaret Keane y su matrimonio. Una pareja de "artistas" que causo revuelo en el mundo del espectáculo y del arte obviamente. De como la mujer se puede sentir atrapada bajo una mentira, pero que también puede participar de esta. Aunque no sea beneficioso para ella: Big Eyes
Margaret Keane (Amy Adams) escapa de su casa con su hija, en busca de una nueva vida.
Lo que no sabía, es que esta no sería la última vez (spoiler)
La cosa es que en ese tiempo, las mujeres eran siete veces menos valoradas que hoy. Era muy difícil encontrar un empleo, decir que era madre soltera era casi un delito.
Pero Margaret sabía a lo que iba, se adecuaba fácil y aceptaba las condiciones para poder trabajar.
Ella hacía muchos dibujos y pinturas, asique se fue a instalar como a una feria, pero donde todos exponían su talento. Pintando a los niños que pasaban, tratando de vender sus cuadros, etc. Ahí conoce a Walter (El maravilloso Christoph Waltz) que se muestra muy confiado, simpático y agradable. Llama de inmediato la atención de Margaret. Cuento corto, se terminan casando.
La cosa es que se juntan a pintar, a buscar la "inspiración" en un parque de cerca. Ambos estaban con un cuadro y pinceles. Margaret ya llevaba como 20 mil dibujos en el óleo, pero Walter ni había empezado. Lo que llamó la atención de la hija de Margaret, preguntándole por qué aún no empezaba. Pero él se excuso diciendo que aún no encontraba la inspiración necesaria.
Walter iba a las galerías de arte mostrando sus cuadros, para que así estos puedan ser expuestos. Al mostrarlos, llevó uno de Margaret. Estos cuadros con niños de ojos gigantes y tristes. Lo que llamó la atención del tipo, pero ni tanto porque los rechazó igual.
Logran alquilar las paredes de un bar, llamando la atención de la gente. Walter le pide a Margaret, que pinte mas cuadros. Lo cual tiene que quedarse mas tiempo en casa, dibujando y pintando. Mientras él, los vende en el bar y obviamente lo pasa cachilupi.
Pero cuando le preguntaron que quien había hecho esos cuadros, las pinturas de niños tristes con ojos gigantes, Walter mintió diciendo que eran de él.
Lo que causó mucha rabia en Margaret, ya que sus cuadros eran como sus hijos y se los estaban quitando. Ella igual quería reconocimiento, porque al fin y al cabo, ella los había pintado con esfuerzo.
Después de un tiempo, siguen con la mentira para lograr la publicidad, y las ventas que tanto deseaban. (o que Walter deseaba) Él se iba con todo el crédito, era conocido en muchos lados y ya estaba siendo un icono de ese tiempo. Mientras Margaret se quedaba en casa, pintando como mona encerrada. Todo para que Walter siguiera haciendo su riqueza.
Basado en una historia real, con un desenlace que encontré genial. Es una película entretenida para ver en familia. Ah. lo que mas me gustó fue la banda sonora, Lana del Rey nos expresa todo lo que Margaret siente con sus canciones "Big eyes" y "I can fly", que esta ultima sale en los créditos.